Nuestras
Novedades

Noticias, Información y más.

Volver

Nuestra lechería en su laberinto más difícil

Nuestra lechería en su laberinto más difícil

Super Campo
noviembre 2018
Por Daniel Villulla.

Una sucesión de inundaciones y sequías, seguidas de un vendaval macroeconómico, disparó los costos, alteró las relaciones de precios, y puso a la producción lechera en situación muy complicada. De acuerdo a datos del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina, entre Diciembre de 2017 y Septiembre de 2018: el dólar subió 118%, el precio al productor subió 39%, y sus costos 61%, el mix de valor del litro en salida de fábrica lo hizo un 29% para un mercado interno con una inflación del 31%, y los precios internacionales se mostraron moderados, con tendencia a la baja. Hacia el corto y mediano plazo, la economía argentina muestra a su vez que nuestro paquete de graves desequilibrios no se va a poder desarmar sin afectar por un tiempo el nivel de actividad económica. Así, nuestra lechería se enfrenta a su laberinto más difícil. Con tamberos con precios bien abajo de sus costos, e industrias complicadas para poder pagar los incrementos importantes que se solicitan. Necesitamos bajar los costos y subir los precios, las dos cosas. Porque no parece que ninguna se pueda modificar por sí sola, en una magnitud que permita resolver el problema. La primavera, ayuda temporariamente en el primero de los cometidos, aunque nuestras vacas no puedan expresar todo su potencial productivo. Hoy se dispone de pasto, pero en muchos tambos se terminaron temprano las reservas, y hubo que resignar cantidad/ calidad de alimento balanceado en la alimentación. Además, en busca de la “caja” que falta en el tambo para enfrentar las obligaciones, algunos productores incrementan la agricultura y otros han extremado la presión de selección en sus rodeos y han descartado muchos animales. ¿Qué vemos hacia adelante?: El clima parece que nos jugará más a favor que el año previo. Y eso no es poco. La capacidad y la plasticidad del productor van a poder más que los obstáculos. El “pico” de primavera ya está, y no va a ser importante este año. El consumo interno de lácteos ha caído, pero será uno de los primeros en recuperarse. Las exportaciones ayudan en la coyuntura, aunque sin la fuerza que esperábamos. La demanda interna y externa prevalecerá sobre nuestra oferta. Y eso permitiría sostener el proceso de recuperación de los precios, si se logra estabilizar el dólar. Vamos a salir. Es una empresa muy difícil. Pero vamos a salir. Necesitamos que la economía se estabilice para ir restableciendo relaciones de precios económicamente lógicas para la producción lechera. Somos tan competentes para todo lo que es el trabajo, la organización sistémica, y el armado de equipos “tranqueras adentro”; como no lo hemos sido para el desarrollo institucional y comercial de nuestro sector y de la cadena, “tranqueras afuera”. Pero podemos cambiar. Nuestro futuro dependerá en gran medida de cómo nos encuentre de bien o mal organizados, de más fortalecidos institucionalmente, o más librados a nuestros sentimientos. Las inclemencias llegan para todos, pero afectan más a los desordenados. Fuente: www.pressreader.com/argentina/super-campo/20181105/283317523427880

Volver