La mastitis clínica es la mayor enemiga de los ordeñadores. Curarla lleva tiempo y esfuerzo, no curarla mucho más.
La mastitis es una inflamación de los tejidos de la ubre, un proceso casi siempre infeccioso, al cual la vaca responde elevando su nivel de anticuerpos: aumenta los glóbulos blancos y las células de descamación. Siempre hay algo de mastitis subclínica, porque la vaca tiene un nivel mínimo de células somáticas en su leche. Pero cuando el cuadro llega a su expresión clínica y tenemos síntomas visibles, pasa a ser peligrosa para la vaca y el rodeo. La detectamos por la presencia de grumos (pus) en la leche. Existe un plan mundial de cinco puntos para el combate de la mastitis: • Correcto funcionamiento e higiene de la máquina de ordeño • Diagnóstico temprano y correcto tratamiento de las mastitis clínicas • Correcta técnica de sellado postdipping • Eliminación de vacas crónicas • Aplicación de terapia antibiótica de secado a todas las vacas En TamboDem combatimos la mastitis basándonos en los puntos mencionados previamente. No obstante, adaptamos el plan a nuestro sistema buscando obtener los mejores resultados. Realizamos un ordeñe derecho sin lavado ni chorros. Cuando nosotros decimos que practicamos el ordeñe derecho sin lavado ni chorros, no estamos diciendo que no nos importa la higiene ni que ignoramos la mastitis. Hay que ordeñar ubres limpias y hay que combatir la mastitis clínica. • Las ubres limpias nacen con callejones sin barro. Pero si hay barro, se lo saca con la mano cuando es barro seco; y si es barro mojado, hay que lavar. • También usamos crema pre ordeñe para los pezones agrietados. • La mastitis clínica debe detectarse. • Se examina el filtro para ver grumos. • Se monitorea el recuento de células somáticas. • Se observa la ubre palpando para detectar temperatura y algún cuarto tenso • Una vez por semana, o cada vez que tenemos recuento alto, sacamos chorros. El ordeñe es una tarea como cualquiera del tambo donde se practica la observación inteligente. Técnica de sellado postdipping Habitualmente se efectúa este baño con una copa en la que se sumerge el pezón. Para ganar tiempo, este tambo tiene un equipo para el rociado. Este equipo solo puede ser operado por ordeñadores con criterio: es demasiado fácil rociar mal los pezones y demasiado fácil gastar mal y más remedio. Control lechero bimensual, diagnóstico de mastitis y rechazo de vacas crónicas Luego de analizar los resultados obtenidos en el último control lechero y la calidad de leche obtenida en el último período, se procede a: 1. Seleccionar las vacas con más de 1.000.000 de células. 2. Se realiza el California Mastitis Test (CMT)* para detectar cuartos afectados con mastitis subclínicas. 3. Las vacas diagnosticadas arrancan un tratamiento con antibiótico y antinflamatorio, en caso de ser necesario. 4. Previo a dar el alta al animal se evalúa nuevamente el o los cuartos afectados con el mismo test. En el caso que la evolución sea negativa, se pasa a otro antibiótico; en cambio, si la evolución es positiva, se habilita al rodeo de leche. 5. Aquellas vacas que repiten mastitis en un mismo cuarto o cuartos, se considera vaca crónica y debe ser rechazada. Aplicación de terapia antibiótica de secado a todas las vacas El período seco es de alto riesgo ya que durante el mismo se pueden contraer más del 60% de las nuevas infecciones mamarias. La terapia antibiótica al secado de todos los cuartos y todas las vacas se realiza para curar las infecciones intramamarias subclínicas y prevenir las nuevas durante el período seco. En TamboDem utilizamos el secado abrupto. Las vacas se ordeñan todos los días hasta el último ordeñe. Se las puede alimentar menos unos días antes. Luego del último ordeñe se procede a aplicar la terapia de secado. Se limpia cada pezón con toallas individuales. Se inserta el pico del pomo solo 5 mm dentro del pezón, se inyecta el antibiótico de secado e inmediatamente se aplica el sellador. La tarea requiere paciencia y atención al detalle. Las vacas deben ser alejadas del tambo enseguida. Respetando el plan de los cinco puntos vamos a prevenir los brotes de mastitis en todo el rodeo y no sufrir la peor pesadilla del tambero. Y cuando hay un brote de mastitis, con seguridad es por haber descuidado alguna de estas cinco normas. *El CMT para la detección de mastitis, es un método indirecto que permite estimar la cantidad de ácido desoxirribonucleico (ADN) de las células nucleadas en la leche. El reactivo del CMT es un detergente con indicador de Ph que, al mezclarse con la leche en partes iguales, disuelve las paredes celulares y nucleares de los leucocitos presentes, liberando el material nuclear. EL ADN libre forma una masa gelatinosa que aumenta de consistencia proporcionalmente al número de leucocitos presentes en la leche (Mellenberger, 2001). Se considera un método fiable para determinar la mastitis subclínica de una forma rápida durante el ordeñe (Ruegg, 2003). Esta prueba tiene una alta correlación con el recuento de células somáticas en la ubre, siendo un excelente indicador de los cuartos sospechosos de la ubre en las vacas con descargas celulares. https://citarea.cita-aragon.es/citarea/bitstream/10532/3829/1/VAC0028.pdf
